Aunque se ha incrementado la siembra de café en República Dominicana, la producción local atraviesa por numerosas “necesidades”, que van desde la falta de recursos financieros hasta el mantenimiento y los insumos adecuados. Pero a esto, también se le han agregado los “altos costos” para iniciarla.
Así afirmó ayer a Listín Diario uno de los miembros de la Confederación Cafetelera Dominicana (Concafed), Enrique Chalas, a propósito del Día Nacional del Café, que se celebra cada 11 de abril.
“Si las zonas cafetaleras son descuidadas en cuanto a electricidad y en otros servicios innegablemente que el agricultor, el campesino preferirá ir a la ciudad. Ese es un problema que nos afecta, y por otro lado dependemos bastante de la mano de obra extranjera”, añadió Chalas.
Los reportes que maneja Concafed indican que en la actualidad hay unas 700,000 tareas de café en producción, de 1.5 millones de tareas que han sido sembradas.
“El costo de producción comienza con la preparación de la mata (para lograr el grano). El café es el único cultivo en el mundo que da su vida por los hijos. O sea, cuando el café pasa de la cosecha, queda totalmente desnutrido e indefenso”, explicó.
“A ese café, hay que limpiarlo, podarlo, abonarlo, y después que eso ocurra hay que poner las trampas para mantener el control de la Broca (un insecto que afecta los cultivos), y el costo es muy elevado”, agregó.
IMPORTACIONES
Las importaciones de café y sus variantes (sin tostar ni descafeinar, descafeinado sin tostar, tostado sin descafeinar, y tostado descafeinado) se imponen ante la producción nacional.
En 2023, todas esas variedades registraron US$54,6 millones del total importado. Esa cantidad representó un decrecimiento de un 13 %, comparado con el 2022, año que cerró con US$62,8 millones, según datos de ProDominicana.
Mientras que, en las exportaciones, el país recaudó US$19,8 millones, lo que supone una variación negativa de un 44.6 %. En 2022, el Estado recaudó US$35,8 millones.
“Estamos exportando café, pero estamos importando un 70 % del consumo nacional. El café de nosotros es uno de muy alta calidad. Los comerciantes consiguen suficiente dinero para exportar el café que le permite, a su vez, importar un café que es de otras calidades, con bajo costo y diferente al nuestro”, explicó Chalas.
SEPA MÁS
COMPRAS
El país compra todos estos tipos de cafés desde Brasil, Vietnam, Honduras, El Salvador, Estados Unidos y Suiza. Durante cuatro años (2020-2024), el Estado le ha comprado más cafés a Brasil. El año pasado, solo de café sin tostar ni descafeinar y tostado sin descafeinar, la compra fue de US$34.2 millones.
EXPORTACIONES
En exportaciones, el país recaudó US$19,8 millones, lo que supone una variación negativa de 44.6 %. En 2022, el Estado recaudó US$35,8 millones. . En 2022, el Estado recaudó US$35,8 millones.
QUINTALES
Durante esta gestión se han exportado 281,891.89 quintales.