Faustino Reyes Díaz.
Neyba, Bahoruco.
Alcaldes y agricultores de esta provincia, respaldan las 15 medidas anunciadas el pasado domingo por el presidente Luis Abinader para controlar la masiva inmigración de ilegales, en su mayoría haitianos, que preocupa a los dominicanos y ha generado protestas como la reciente marcha hacia la comunidad de Friusa al Este del país.
El alcalde de este municipio cabecera, Yadel Subervi (Potioco), asegura que el gobernante dominicano cuánta con el respaldo de toda la municipalidad de Bahoruco, aunque plantea otras acciones para reducir el impacto que pudiera recibir la economía con las medidas oficiales.
Dijo, que el mandatario trata de regular la presencia de indocumentados que deambulan por las calles desde pasadas administraciones y denunció que hay dominicanos que se presan de garantes para que esas personas adquieran viviendas y motocicletas.
Potioco, considera que las medidas oficiales afectarán el mercado local y a los productores agrícolas y abogó por acciones que contribuyan a reducir el impacto económico.
"Se tendrá que hacer una especie de híbrido para que no se afecten todas las partes y haya un control en lo que tiene que ver con el comercio y se tomen las medidas para que no se produzca el contrabando y la ilegalidad", dijo Subervi.
JUNTA DE REGANTES.
El presidente de la Junta de Regantes del Valle de Neyba, Evaristo Ferreras, consideró que de los ilegales haitianos que hay en la zona solo un 20% trabaja en la agricultura y la construcción.
"El haitiano es un mal necesario, pero nos están haciendo muchos daños, nos roban, matan niños y gente adulta. La mayoría de los haitianos que tenemos aquí no están trabajando, hay algunos que trabajan, pero, la mayoría está atracando, robando y haciendo de todo", dijo.
Ferreras, quien dirige, además, un núcleo de regantes y una asociación de productores, agregó "yo estoy de acuerdo con que se saquen todos esos haitianos y que se les dé papeles, si hay que darles, a los que están trabajando, tienen conucos a medias y los que son albañiles".
Las 15 medidas anunciadas por Abinader.
Reorganiza la vigilancia fronteriza: las 3 brigadas actuales se dividen en 6 zonas bajo supervisión de oficiales superiores.
Refuerza la frontera con 1,500 nuevos soldados, sumando un total de 11,000 desplegados permanentemente.
Someter al Congreso una reforma legal migratoria para endurecer sanciones contra funcionarios y ciudadanos que faciliten la migración ilegal.
Se incorporan 750 nuevos agentes migratorios a la Dirección General de Migración.
Se instalan oficinas migratorias en todas las provincias para aumentar la capacidad operativa de control.
Se modificará el reglamento de operación de los mercados binacionales para evitar que se conviertan en puertas para el cruce irregular.
Se solicitará a la Procuraduría crear una Procuraduría Especializada en Asuntos Migratorios para judicializar los delitos vinculados.
Se pedirá colaboración de gobiernos locales para eficientizar las repatriaciones.
Se crea el Observatorio Ciudadano de Política Migratoria, coordinado por Miguel Franjul, con autonomía e independencia.
Se establece un nuevo protocolo en hospitales del SNS: identificación, carta de trabajo y prueba domiciliaria como requisitos para atención médica.
Milton Ray Guevara liderará una comisión que revisará el marco jurídico migratorio ante la situación excepcional de Haití.
Se propone una "dominicanización del empleo" con aumento salarial de 25 % en zonas francas y 30 % en turismo.
Beneficiarios de Supérate podrán insertarse en el trabajo formal sin perder el subsidio estatal.
Se ampliará el fondo del BANDEX para mecanizar agricultura y construcción, reduciendo la dependencia de mano de obra irregular.